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Por el 03 de diciembre, Día Internacional de las Personas con Discapacidad, el Conadis organizó la mesa redonda Cuidado al Cuidador, para reconocer la noble labor de quienes tienen bajo su cuidado a personas con discapacidad.

“Cuidar a alguien es una labor, exigente y satisfactoria; demanda tiempo, esfuerzo físico y emocional. Por eso el cuidado de una persona cercana o ser querido puede vivirse como una experiencia digna y merecedora de reconocimiento por la familia y la sociedad”, señaló la Dra. Tatiana Escobar, secretaria Técnica del Consejo.

Liliana Pelaia, presidenta de la Federación Ecuatoriana Pro Atención a la Persona con Discapacidad Intelectual, Síndrome de Down, Autismo y Parálisis Cerebral – FEPAPDEM y madre de un joven con discapacidad intelectual, habló de la necesidad de apoyo emocional de los cuidadores; señaló que, a partir de un estudio realizado con una muestra de 660 hogares, el 90% de cuidadores de personas con discapacidad son mujeres, quienes dedican 112 horas semanales al cuidado. “Las cuidadoras cuentan con muy poco tiempo para desempeñar actividades diferentes a las de su función, pueden dedicar espacios tan reducidos como 1.89 horas semanales a cuidar de su salud, 1.86 horas al ejercicio físico, 3.02 horas semanales a la pareja y amigos y 1.8 horas a la recreación”, enfatizó.

Mónica Mejía, de la subsecretaría de Discapacidades del Ministerio de Inclusión Económica y Social, expuso sobre los espacios de respiro y redes de apoyo para el cuidador en el Ecuador. En su intervención, informó sobre el síndrome del cuidado o “burnout”, donde la persona que cuida a otra puede desarrollar episodios de estrés de variable intensidad. “Se trata de un trastorno con unas implicaciones graves tanto a nivel físico como psicológico”, dijo. Ante ello, señaló la importancia del autocuidado, que incluye la participación de recursos de la comunidad y la adopción de un estilo de vida saludable.

Para Estefanía Rivera, del Comité de personas cuidadoras de personas con discapacidad y madre de un niño con discapacidad, el cuidado es una tarea que requiere amor y dedicación. Mencionó que las terapias son fundamentales para el bienestar integral.

Por último, Belén Rodríguez, de la OIM -cuya misión es garantizar una migración de forma segura, ordenada y regular- habló sobre la Guía Cuidando al Cuidador, un documento que ofrece orientación a cuidadores y profesionales de la salud sobre el bienestar y prevención de la violencia basada en género y en contra de personas con discapacidad. Este documento tiene un enfoque de derechos humanos y considera los principios de no re-victimización y acción sin daño.

Durante el desarrollo de esta mesa redonda se presentaron videos realizados por jóvenes estudiantes de universidades e institutos tecnológicos, a quienes el Consejo agradece por tu participación en la reflexión de la atención a las personas con discapacidad y sus cuidadores.